En su balance sobre el viaje, que se cerró sin sobresaltos, Montilla apuntó que ha sido “muy provechoso”. “Hemos avanzado sustancialmente en los objetivos propuestos; es un empuje a la relación entre los dos países, una relación que tiene mucho recorrido”, dijo el presidente catalán.
Acuerdos económicos, aprobados con sobresaliente
La comitiva del Govern, en la que también participó el vicepresidente, Josep Lluís Carod-Rovira, contó con los representantes de sesenta empresas catalanas presentes en Marruecos y se cerraron una serie de acuerdos y convenios de importancia comerciales. Uno de estos acuerdos “estrella” es el convenio por el que el Puerto de Barcelona dispondrá de diez hectáreas de suelo para actividades logísticas en el Puerto de Tánger, así como la creación de un polígono industrial para firmas catalanas.
También destaca la presentación por parte de la Generalitat de “Mediterránea”, un fondo de capital riesgo dotado con 62 millones de euros que será gestionado por la compañía Riva y García y que busca promover proyectos empresariales en el Magreb, en especial en Túnez, Argelia y Marruecos. Un proyecto en el que participan, por parte del sector público, el Institut Català de Finances (ICF), el Instituto de Crédito Oficial (ICO) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y, del sector privado, Caixa Catalunya, Repsol, Telefónica, La Caixa y Gas Natural.
Asimismo, una declaración común relativa al programa de cooperación marroquí-catalana en el sector agrícola para el periodo 2008-2012.
El Sáhara, tema tocado “de refilón”
En una visita de esta índole, que ha durado varios días hasta el 11 de abril, no se ha pasado por alto el interés de Marruecos por obtener declaraciones favorables de Montilla sobre la propuesta marroquí de autonomía del Sáhara Occidental.
La prensa marroquí se hizo eco de unas declaraciones del presidente catalán a la agencia marroquí MAP en la que afirmaba que la propuesta marroquí de autogobierno para el Sáhara era un “punto de partida” para la solución del conflicto del Sáhara.
"Desde luego, la propuesta marroquí de conceder al territorio amplia autonomía es un avance sustancial y un buen inicio para solucionar el conflicto", declaró Montilla la víspera del inicio de esta visita de tres días a Marruecos.
Estas declaraciones han servido a las autoridades marroquíes para reunirse con Montilla y debatir sobre el modelo de Cataluña y su estatuto de autonomía, como referente para solucionar el conflicto del Sáhara Occidental.
Por ello, Montilla explicó la experiencia catalana al ministro marroquí de Exteriores, Taieb Fassi Fihri, y consideró un “orgullo” que el Gobierno de Marruecos se interese por la autonomía catalana. También se reunió con el Primer Ministro, Abbás El Fasi, el Presidente del Parlamento, Mustafa Mansuri y el presidente del Consejo Real Consultivo para Asuntos del Sahara (CORCAS), Jalihenna Uld Errachid, el principal asesor del rey marroquí para asuntos relacionados con el Sáhara.
No obstante, el presidente catalán precisó a los periodistas que cubren su viaje que "una cosa es el punto de partida, y otra, el de llegada". "Este último lo deciden los pueblos", agregó.
Es destacable también, según informa el medio “El Periódico”, que Carod-Rovira, el vicepresidente catalán “defensor de la causa del Frente Polisario y anfitrión personal durante muchos veranos de niños saharauis refugiados en los campamentos del desierto argelino, acudió también a ambas reuniones luciendo el anillo típico saharaui del que nunca se separa. Ese fue su único guiño, apoyado en la idea de que el anillo no es un símbolo político, sino una muestra de artesanía popular”.
En estas reuniones no acudió finalmente el monarca marroquí Mohamed VI, a lo que Montilla recordó que el rey no ha estado estos días “ni en Casablanca ni en Rabat, lo que hacía imposible” la audiencia real, puesto que se encontraba realizando inauguraciones en la zona del Atlas, a más de 200 kilómetros de Rabat, según informó la prensa marroquí.
Autonomía marroquí para el Sáhara, única vía de negociación para Marruecos
El conflicto del Sáhara occidental, que dura más de 30 años, sigue sin hallar una solución viable para las partes implicadas: Marruecos y el Frente Polisario. Bajo el auspicio de las Naciones Unidas ambas partes han mantenido cuatro rondas de negociaciones desde junio de 2007, sin que se hayan producido ningún avance significativo.
Marruecos es tajante en su postura: la única vía de solución es la autonomía del Sáhara a cambio de renuncia a la soberanía. Pero el Frente Polisario sigue reivindicando el derecho a celebrar un referéndum de autodeterminación para votar si se desea autonomía o independencia.
En este contexto, por tanto, es comprensible el interés de las autoridades marroquíes por conocer mejor el sistema autonómico español con Cataluña como referente; previendo medidas de descentralización y de transferencia de competencias, algo inédito en Marruecos.
En otro orden de ideas, al margen del tema político sobre el Sáhara Occidental, Montilla hizo hincapié en la importancia de seguir estrechando aún más la cooperación cultural y saludó los "esfuerzos positivos" de integración de más de 200.000 marroquíes residentes en Cataluña en su reunión de hora y media con Abbas el Fassi.
Esta visita más que fructífera, que ha supuesto el asentamiento de las buenas relaciones de la comunidad catalana con Marruecos, en la que Cataluña se configura como socio privilegiado de este país, puesto que de las empresas españolas asentadas en Marruecos, más de un tercio provienen de esta comunidad española.
España y Cataluña en concreto han visto de forma clara las oportunidades que ofrece mantener lazos comerciales estrechos con su país vecino del sur, en sectores emergentes y de especial interés para las autoridades marroquíes.
PTZ
(14/04/08)