En vísperas del primero de mayo, celebración de la “fiesta del trabajo”, y en un contexto definido por tensiones sociales a todos los niveles, esta noticia ha caído como un jarro de agua fría, ya que incluso se habla de una huelga general que será indudablemente la primera en su género bajo el reinado del monarca Mohammed VI.
Nueve miembros del sindicato representados en la cámara de los consejeros (el senado) presentaron una dimisión colectiva al presidente de la segunda cámara en signo de protesta contra "la incompetencia del parlamento y la impotencia del gobierno en estos momentos de tensiones sociales", señalaron responsables del sindicato en declaraciones a la prensa.
Esta decisión asalta en el momento en el que el diálogo entre el gobierno y los cinco sindicatos más representativos está en su tercera fase, iniciada el lunes pasado con el ejecutivo del Primer ministro, Abbas El Fassi.
Los sindicatos marroquíes están "decepcionados" con las propuestas y medidas proporcionadas por del gobierno; en particular en el momento de la tercera ronda del "diálogo social".
Debido a esto, dos centrales sindicales, la Unión marroquí del trabajo (UMT) y la confederación democrática del trabajo (CDT) han saltado a la palestra para "rechazar" las proposiciones del ejecutivo de Abbas El Fassi, que se quedan, en palabras suyas, "por debajo de las aspiraciones".
Cabe recordar que el gobierno marroquí había propuesto durante estas rondas de negociaciones con los cinco sindicatos más representativos un ascenso de la renta de los empleados de los sectores públicos y privado entre un 10,4 y el 18 por ciento, así como una disminución del impuesto general sobre la renta (IGR) para pasr del 42 al 38 por ciento.
Por añadidura, un aumento de 25 por ciento del subsidio familiar, y una revalorización del 20 por ciento de las pensiones mínimas de jubilación. Por otro lado, el salario mínimo (SMIG) consistente en 1850 dirhams, conocería a su vez un aumento del 10 por ciento a lo largo de cuatro años.
Incluso el sindicato la Unión general de los trabajadores de Marruecos (UGTM), próximo al partido de Istiqlal (independencia) que toma las riendas del poder actual, no se abstuvo de rechazar las propuestas formuladas por el gobierno por “no responder a su reivindicación”.
Ciertos periódicos hasta evocan la probabilidad de una huelga general "si el gobierno no repasa sus propuestas" consideradas por ciertos sindicatos de "ridículas". De momento, ninguna reacción por parte del gobierno ha sido registrada después de "este retiro " calificado de "espectacular" de la CDT; organismo constituido en 1978. Igualmente, vale la pena decir que la última huelga general en Marruecos tuvo lugar el 14 de diciembre de 1990.
ABE
(23/04/08)