La ONG achaca esta cifra a la imposibilidad de renovar permiso de residencia al 15% de los que lo hicieron en el último plazo de regularización. En total, 557.800 personas pasaron a engrosar este año la lista de indocumentados. También se muestra crítica con la política europea y especialmente con la española, a la que SOS Racismo atribuye un fomento de la "discriminación" y la "violación" de los derechos y libertades fundamentales del extranjero.
(23/04/07)