Varios absueltos, entre ellos, Rabei Osmán El Sabed, conocido como “Mohamed El Egipcio”, ha causado sorpresa entre la opinión pública. Parece que se cierra página al juicio sobre el atentado más sangriento de la historia reciente española, que dejó 192 muertos y 1.856 heridos. Más vale tarde que nunca.
3 Acusados, 7 Absueltos por falta de pruebas y reducciones de condenas
Jamal Zougam y Otman El Gnaoui han sido considerados autores materiales, culpables de 191 asesinatos y dos abortos, 1.856 asesinatos en grado de tentativa y de cuatro delitos de estragos terroristas por los que han sido condenados a 40.000 años de cárcel.
El español José Emilio Suárez Trashorras, a quien también se condena por los hechos de Leganés, ha recibido una pena algo inferior, de casi 35.000 años al aplicársele la atenuante de "anomalía psíquica".
Otro de los condenados, El Harrak, que estaba en libertad condicional, deberá pasar 12 años de prisión por pertenencia a organización terrorista.
Por otro lado, el que fue considerado como uno de las cabezas intelectuales del 11-M, Rabei Osman El Sabed, conocido entre la opinión pública como “Mohamed El Egipcio”, ha sido absuelto por la Audiencia Nacional, lo cual ha dejado perpleja a la opinión pública.
La absolución de “El Egipcio” en esta sentencia se debe a que no existen pruebas de su participación expresa en el atentado de Madrid, y porque ya cumple condena (de ocho años) por pertenecer a una organización terrorista de corte yihadista global en Milán (Italia), y por tanto no puede ser condenado dos veces por los mismos hechos.
Otros absueltos por falta de pruebas han sido el marroquí Youssef Belhadj, detenido en Bruselas en 2005, y Hassan el Haski. Ambos pasan de cumplir los 39 mil años de prisión que solicitaba la fiscalía, a 12 y 15 años de cárcel respectivamente por formar parte de organizaciones terroristas.
Tampoco el marroquí de 24 años Abdelmajid Bouchar, que logró avisar a sus compañeros de Leganés, cumplirá los 38.950 años de cárcel solicitados, sino 18 años también por pertenencia a grupo terrorista, ya que faltan pruebas que muestren su pertenencia explicita en los atentados del 11-M.
Siguiendo en la misma línea de reducción de condena, está el caso de Rafá Zuhier, que ha sido condenado a 10 años de cárcel (en vez de los 38.968 años pedidos por la fiscalía) por tráfico de explosivos y colaboración con organización terrorista.
Igualmente, Antonio Toro, Carmen Toro, Emilio Llano, Mohamed Moussante, Javier González Díaz, Iván Granados, y Brahim Moussaten han sido absueltos.
En concreto Toro fue quien puso en contacto a Zouhier con su cuñado Suárez Trashorras, quien suministró los explosivos de la mina Conchita.
Casi todo el explosivo era de Mina Conchita
Respecto al tipo de material utilizado para las explosiones, la sentencia recoge la “convicción” de que gran parte de la dinamita que detonó en los trenes de cercanías, y toda la de Leganés (explosión mediante la que se suicidaron siete terroristas al ser descubiertos por la policía, tras los atentados del 11-M), provenía de Mina Conchita.
La conclusión probatoria afirma que el explosivo de Mina Conchita era un tipo de dinamita plástica tipo goma. En concreto, la de Leganés era Goma 2 ECO.
Un apunte a destacar de la sentencia es que, fuera de una marca u otra, esto “no influye en la responsabilidad jurídico penal” de los condenados.
Vehículos usados en el atentado
Junto al tema de la marca de dinamita, uno de los temas más comentados, e incluso rodeados de morbo mediático, fue el tipo de vehículos con el que se transportó a los terroristas para perpetrar los atentados.
En este sentido, la sentencia final no asume la tesis de que los terroristas fueran en dos vehículos hasta Alcalá de Henares, sino que de una furgoneta, Renault Kangoo, bajaron tres individuos y sólo uno de ellos fue hacia la estación de esta localidad madrileña.
Los tres magistrados que han llevado el proceso, calificaron además de “escrupulosa” la actuación policial respecto al traslado de dicha furgoneta hasta las dependencias policiales; poniendo fin a la manida “teoría de la conspiración” que se manejó en varios sectores de la opinión pública sobre una posible “colocación” ajena de un cartucho de dinamita en el interior del vehículo.
De este modo, se afirma como “determinantes” los detonadores encontrados en la furgoneta, la mochila de Vallecas, la casa de Leganés y la finca de Morata de Tajuña, que aúnan los escenarios usados por la célula terrorista de corte islamista extremo.
ETA no está unida al atentado del 11-M
Respecto a la hipótesis de que ETA estaba vinculada a los atentados de Madrid, se ha terminado de cerrar con la rotunda afirmación de que “no existe un solo dato objetivo que vincule a ETA” con estos atentados.
En este sentido, cinco peritos de la Unidad Central de Información (UCI) de la Policía aseguraron que el método de actuación de la banda terrorista no se corresponde con el utilizado en los atentados de Madrid.
En la exposición de los expertos, se desgranó de forma extensa uno de los informes en los que se abordaron posibles vínculos entre ETA y los islamistas y que fue encargado por el entonces comisario jefe de la UCI Domingo Pérez Castaño.
Declaraciones oficiales
Tras la declaración de la sentencia, el presidente español, José Luís Rodríguez Zapatero, ha afirmado en la Moncloa que “hoy se ha fijado la verdad” y ha felicitado a las fuerzas de seguridad y la Justicia por su “averiguación imparcial de la verdad”.
Tras insistir en el comportamiento ejemplar de las instituciones implicadas en el juicio, destacó que “todos los españoles se pueden sentir orgullosos”, porque “se ha impartido justicia” y que ésta es “la respuesta que tendrán los que intenten alterar por la fuerza la libre convivencia de los españoles”.
Respecto a los tres años y medio que ha durado el proceso, Zapatero insistió en que ha sido uno de los juicios “más rápidos, con mayor número de imputados y condenados, de los que se han celebrado en el mundo sobre un atentado provocado por el terrorismo internacional con la dimensión del que tuvo el 11-M.
Zapatero ha afirmado que "hoy se ha impartido justicia" y que ésta "es la respuesta que tendrán los que intenten alterar por la fuerza la libre convivencia de los españoles".
El presidente del Gobierno ha concluido que "la lección que debemos extraer es la necesidad de trabajar unidos contra el terrorismo".
Por otro lado, el ministro español del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, insistió en enfatizar que los atentados fueron obra una célula terrorista de corte yihadista radical, y no de ETA.
En concreto, se ha dirigido al líder del Partido Popular, Mariano Rajoy, para hacerle repetir que “ETA no ha sido. Y que repita con los jueces y las fuerzas de seguridad: ETA no ha sido, para luego a continuación ponernos a trabajar juntos para que no nos vuelva a pasar."
Por otro lado, Rubalcaba ha resaltado que la sentencia es una “reparación jurídica, económica también y moral” para las víctimas y familiares de las víctimas, al tiempo que agradeció la cooperación internacional de países europeos, de EEUU, Argelia o Marruecos.
En Marruecos, país de origen de algunos de los terroristas condenados, ha hecho un seguimiento prudente del proceso y la sentencia. Medios como Al Tachid, Al Ittihad al Ishtiraki, Al Hayat o Al Sabab contemplan entre sus titulares la condena de más de 40.000 años de cárcel de los terroristas Jamal Zougam y Otman El Gnaoui.
(01/11/07)