Salvador López Becerra es un reconocido poeta español cuya prestigiosa labor es referenciada en los círculos más selectos, fuera y dentro de su país. Preside el Ateneo hispano-marroquí y es Director de “Al sur del Sur: otra mirada”: Jornadas de Intercambio cultural entre la ciudad de Málaga y Marruecos”. Anteriormente, y entre otras ocupaciones, fue notable presidente del Ateneo de su ciudad. Su obra poética ha sido traducida a varios idiomas. López Becerra es el coordinador de la Selección (abierta) de Poesía Universal de Webislam. Reproducimos aquí la entrevista realizada por Abdeslam Kharraz para la revista Kasbah.
¿Que retos ha asumido al coordinar las Jornadas “Al Sur del Sur: otra mirada”?
Toda iniciativa siempre supone un reto. Pero trabajar en beneficio de un mayor entendimiento entre España y Marruecos, para mí supone una gratificante experiencia. Mi compromiso con lo marroquí viene de antiguo, es profundo y sincero.
¿Puedes aclararnos cuáles son los objetivos del programa Interreg III?
— Interreg III es una iniciativa comunitaria cuyo objetivo consiste en aumentar la cohesión económica y social en la Unión Europea, fomentando la cooperación transfronteriza, transnacional e interregional, así como el desarrollo equilibrado del territorio. Se presta una especial atención a la colaboración entre las regiones ultraperiféricas y aquéllas situadas en las fronteras externas de la Unión con los países candidatos a la adhesión. INTERREG es una de las medidas que está desarrollando el Excmo. Ayuntamiento de Málaga como actuación en la sociedad civil.
¿De qué logros se siente más orgulloso entre los conseguidos por las Jornadas que dirige?
De la positiva y amplia respuesta recibida por parte de los marroquíes. De la cálida acogida que cada uno de los actos convocados han tenido aquí y de la receptividad de la prensa marroquí.
¿Cuándo fue y con qué motivo su última visita a Tánger?
Recientemente, por una lectura de poemas en el Instituto Cervantes y para participar en un acto en la escuela Rey Fahd de traductores y al homenaje que le tributamos aquí, en el Instituto S. Ochoa, a Mohamed Chukri.
Sabemos que fue usted amigo de Chukri. ¿Qué puede decirnos de él?
Ningún escritor marroquí ha sido traducido como él. A Chukri no hay que contarlo, hay que leerlo, él se dice en su escritura. Chukri es un autor muy fácil de leer, muy claro, de ahí que moleste y sorprenda a tantos. Nunca un escritor árabe moderno se había atrevido antes a escribir con la desnudez que él lo hizo. Su descaro le sirvió para la marginación personal y literaria entre los suyos. Hoy todos dicen haber sido amigos suyo, pero mienten, porque Chukri, en verdad, nunca tuvo amigos. Si en algo se le consideraba en Marruecos era por el eco que su obra tenía en el exterior. Su obra representa un “destape” inaudito para una sociedad fundamentalmente tradicionalista. Cuando se publicó en España “El pan desnudo”, Juan Goytisolo dijo que Chukri había escrito la primera autobiografía árabe honesta. Chukri sólo fue leído, allí y aquí, por lectores desprejuiciados. El realismo sucio, a veces exagerado, de su escritura lo realizaba,también, con cierta intención de provocación, era un ser acosado por su destino. Era duro, no dejaba títere con cabeza.
El pasado noviembre se presentó su libro ˝Kabileño˝,¿Qué nos dice de este libro?
Yo no puedo explicar mi palabra, ella se ha de explicar por sí misma. Sí le puedo decir que KABILEÑO es “Proesía”, poesía en prosa, y que trata de las enseñanzas recibidas por “Amriaz”, un humilde campesino marroquí del que aprendí, a través de su humanidad grandes lecciones. Es un homenaje a los humildes.
˝Entiznar˝ es otra de sus publicaciones recientes.¿De qué trata el libro?
Es un breve ensayo sobre el tatuaje marroquí.
Nos gustaría saber qué significa Marruecos para usted.
¿Que qué significa Marruecos para mi? ¿Tiene usted espacio en la entrevista? Marruecos es para mí más que un Amor geográfico; es arte y parte en mi vida; un sueño cumplido; la visión flotante desde la alfombra mágica de Al-Andalus; fertilidad para mi escritura; cercana lejanía; hermosos recuerdos; el aroma de los oasis inexpugnables de mi libertad; hermoso futuro. Marruecos es poesía en acción; mi mayor fantasía…
Díganos tres lugares, que recomendaría para visitar en Marruecos.
— Cualquier lugar tiene para mí su sabor único. Es verdad que prefiero las zonas rurales a los centros urbanos, aunque existen ciudades magnificas. Marruecos es estética pura. ¿Tres regiones solamente? ¿Por qué me lo pone usted tan difícil?. Veamos…No, no puedo decirle sólo tres, lo siento… ¿Cómo comparar el Rif, sus bosques, su fuerza frente a la belleza de la luz de Yebala? ¿Cómo no recomendar la zona atlántica con sus hermosas, inabarcables playas y solitarios parajes? Y aunque fue la zona de Khenifra-Azrou-Ifrán la elegida para construir mi propia casa ¿cómo anteponer sus magníficos bosques de cedros y hermosos lagos ante la belleza del Tafilalet; cómo, dígame, obviar los jardines espumosos de sus palmerales? ¿Qué diría mi conciencia si omito la zona de Skoura, El Kelaâ M`Gouna…? Y si lo hago con los alcázares de Figuid, la melancolía de Bouarfa o las cumbres y alrededores del Toubkal, en el valle de Urika? ¿Cree que sería justo?. ¿Y el Sur? ¿No cree que el Sur merece el reconocimiento de cualquier persona sensible?: Tafraute, Tiznit, Taroudant… Lo siento, no puedo, no, decirle sólo tres lugares; yo puedo vivir felizmente en cualquier parte de Marruecos.
Aquí en Marruecos se le respeta, se le estima y se valora cuanto hace. Todo el mundo está de acuerdo en que es usted, junto a J. Goytisolo, un intelectual amigo de Marruecos y por ello es también muy querido. ¿No se ha planteado trabajar en Marruecos?
Muchas gracias por sus exageradas palabras. Los andaluces y los marroquíes, además de largos años de cultura en común, tenemos la dote de la exageración. Sí, claro, tal vez un día trabaje en Marruecos. In Cha Alá.
¿Le gustaría, a través de “Kasbah”, decir algunas palabras a los profesores y alumnos de este Centro, y a todos los lectores de la revista?.
Sí, que Marruecos es el país extranjero en el cual España tiene una mayor presencia educativa. Y que desde la desgraciada expulsión realizada por los Reyes católicos en 1492, el español se habla en Marruecos. Un lujo que hay que cuidar. Quiero felicitar a todos aquellos que eligieron estudiar la lengua de Cervantes.
(28/08/06)