Durante los días 24 y 25 de septiembre se ha celebrado en el Jardín Botánico de Córdoba (Andalucía) el encuentro titulado “La Cooperación Andaluza al desarrollo en Marruecos: Una mirada desde el género”, organizado por la ONG MZC junto a la colaboración del Ayuntamiento de Córdoba y la Junta de Andalucía. En este encuentro se ha puesto en la mesa varios debates o mesas redondas en torno a la Cooperación Andaluza actual en Marruecos.
En palabras de la presidenta de la ONG Mujeres en Zona de Conflicto, Mila Ramos, el objetivo de este encuentro es poder estudiar la situación real de la cooperación internacional dentro del enfoque de género y poder “trabajar acciones estratégicas de empoderamiento de mujeres y hombres”.
Para Mila Ramos, “el futuro de los pueblos está en su gente”, de ahí la importancia de dar peso a la sociedad civil, para que sean dueños de sus destinos. Un desarrollo social sostenible en el país vecino “que beneficiaría a todos”, afirma.
Por otro lado, insistió en poder potenciar el desarrollo a favor de las mujeres marroquíes, porque “son el motor, el impulso del Marruecos moderno”.
Como inicio para contextualizar esta situación actual, la profesora de Historia del Islam y experta en derecho de familia de los países árabes, Caridad Ruiz, ofreció una conferencia sobre la reforma de la Mudawana de 2004. En esta exposición se hizo un repaso claro de las innovaciones de esta reforma del Código de Familia de 2004 respecto a las llevadas a cabo en 1993 y 1999.
Conceptos como Repudio o Divorcio, el hecho de ser una ley trabajada por los Ulemas junto al Parlamento u otros aspectos claves de esta reforma fueron explicados y debatidos entre los participantes. Como conclusión, se llegó a la realidad actual: A pesar del gran avance que ha supuesto esta reforma, aún hay discriminaciones por mejorar (como no poder casarse con un no musulmán, o la herencia) y sobre todo se debe aplicar de forma real en los contextos rurales y urbanos.
A raíz de esta conferencia se sucedieron otras sobre la propia cooperación andaluza y las oportunidades de transversalizar el enfoque de género, así como las oportunidades para la igualdad de género y la autonomía de la mujer, en la que participó Nadia Koubia, del “Forum des femmes de Alhoceima”.
Por su parte, la coordinadora general de la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional, AACI, Carmen Marfil, destacó que se está creando desde la AACI un “Nuevo Instrumento de Vecindad”, como sucesor de los programas Interreg, que otorgan nuevos mecanismos para dar recursos europeos a los agentes andaluces y marroquíes para fomentar una cooperación conjunta.
Para Marfil, es significativo que “Marruecos está muy cerca de Andalucía, aunque Andalucía esté muy lejos de Marruecos”. Con esta frase, ponía de relieve la necesidad por parte de los agentes que cooperen en el país vecino (ongs, instituciones, empresas, universidades, cámaras de comercio, sindicatos, etc) de adentrarse en Marruecos con un conocimiento pleno real de la situación del país en el que trabajan cooperando.
Asimismo incidió en el problema actual de la descoordinación con otros agentes de cooperación que no forman parte de la AACI, y resaltó como punto positivo que hoy el ámbito político marroquí “tiene en la mesa el caso social”, no sólo el ámbito macroeconómico, por lo que hay un “ambiente positivo que propicia y fortalece” el tejido asociativo y la cooperación internacional.
Como representante del Ayuntamiento de Córdoba en materia de cooperación local, Víctor Fernández destacó que desde 1999 a 2004 sólo se habían apoyado 6 proyectos en Marruecos desde el ayuntamiento. Desde su punto de vista, aún faltan interlocutores con fuerza institucional que sirvan como modelo, porque hay una institucionalidad incipiente que debe crecer y asentarse.
Por otro lado, añadió el profundo desconocimiento de la realidad marroquí por el idioma y por las diferencias en ámbitos como la zona rural o el aspecto cultural de la mujer y su peso real en la sociedad.
Como potencialidad destacó que la cooperación de tipo local en Andalucía se centra en el Norte de Marruecos, lo cual fomenta la concentración de los esfuerzos en un área geográfica, y destacó la importancia del FAMSI y programas europeos como ARTGOLD, que sirven de modelo o referencia para la cooperación local.
Isabel Marín, la representante de la ONG granadina ACPP (Asamblea de Cooperación por la Paz) que trabaja en la zona nororiental del país, con el amplio sector rural, incidió en que se debe fomentar un tipo de financiación que fomente proyectos a largo plazo, para tener resultados tangibles en materia de salud y educación, por ejemplo.
Igualmente señaló la necesidad de interactuar más activamente con la investigación universitaria en materia de cooperación.
En este sentido, José Luís Villena, representante de la Universidad de Melilla, también resaltó la necesidad de “hacer uso y abuso” de la universidad como espacio para lograr mayor efectividad en la cooperación al desarrollo, tanto en voluntarios como investigaciones.
También incidió en la visión de las mujeres marroquíes del norte de Marruecos sobre la cooperación internacional, destacando la importancia de la incorporación universitaria de las mujeres, la referencia de la cooperación exterior como modelo a seguir y mejorar, su sentimiento de invisibilidad por parte de la administración pública y los entornos claves en los que cooperar, como la alfabetización, apoyo técnico, formativo y sindical, y apoyo sanitario y a macroproyectos.
Otros participantes en la mesa redonda, como Medicus Mundi, APY Solidaridad en Acción, y Solidaridad Internacional-Andalucía, cerraron sus impresiones sobre el estado actual de la cooperación andaluza en Marruecos con ideas como realzar la coordinación, identificar los proyectos desde abajo para ser totalmente efectivos, dedicar más tiempo a la evaluación de los proyectos para su optimización y erradicar el imperialismo cultural al llegar a un país con una cultura diferente, con detalles como simplemente respetar la noción de tiempo de cada uno.
Por otro lado, como cierre final, considerar la importancia de usar la noción de género de forma transversal en toda la cooperación internacional, para dar fuerza y peso a la mujer y poder así lograr un equilibrio social pleno que fomente el desarrollo del país.
P.T.Z
(26/09/07)