Se trata de una iniciativa llevada a cabo por el Centro marroquí de Documentación, de Información y de Formación en Derechos Humanos (CDIFDH), y supone un paso sin precedentes en la región del Norte de África y del Medio Oriente.
Este plan, por sus siglas conocido como “PANDDH”, está subvencionado por la UE con un importe de dos millones de euros, y aspira a instaurar un marco idóneo y homogéneo en donde consolidar los derechos humanos en Marruecos.
En concreto esta nueva iniciativa, respaldada por la Unión Europea, se inscribe dentro de las recomendaciones de la Conferencia Mundial de los derechos Humanos de Viena (1993), que incita a los países a examinar la posibilidad de elaborar un Plan de Acción Nacional en el cual se prevén las medidas necesarias para mejorar la promoción y la protección de los derechos humanos.
Hay que tener en cuenta que este plan no sólo supone un precedente en la región, sino que remarca el vivo interés de las autoridades marroquíes por fortalecer el proceso de transición democrática y el establecimiento pleno del Estado de Derecho.
Marruecos, desde que subió Mohamed VI al trono en 1999, está realizando esfuerzos por mejorar la situación social de la población, y poder lograr una reconciliación con el pasado, a través de la gestión de medidas para las víctimas de las violaciones de derechos humanos, por ejemplo con la creación del Comité Consultivo de Derechos Humanos y ahora con este plan.
ABE
(29/04/08)