Por primera vez en la historia del islam una comunidad musulmana, los cerca de 40.000 habitantes de Melilla que profesan esa religión, saben con 15 meses de antelación -y no sólo con días- cuando celebrarán esa fiesta que conmemora la orden dada por Alá a Abraham para que canjeara a su hijo, al que se disponía a sacrificar, por un cordero.
Quedó entonces establecido que el islam no permitía sacrificios humanos.
"Es una decisión que no tiene precedentes en el mundo quitando, por supuesto, los Estados islámicos", declaró satisfecho, a este periódico, Abderramán Benyahia, portavoz de la Comisión Islámica de Melilla. "Es un paso histórico del que nos felicitamos", añadía Miguel Marín, consejero melillense de Administraciones Públicas. Melilla está gobernada por el Partido Popular.
"Coincidimos en que la fecha más probable sería el 17 de noviembre", señala Benyahia. "Es verdad que nos la jugamos un poco, pero es casi seguro que la fecha elegida coincida con uno de los tres días en que se celebra el Aid el Kebir", una fiesta que dura 72 horas. "En cualquiera de ellos se puede sacrificar el cordero", recuerda.
"La decisión supone el reconocimiento de una parte importante de la población de la ciudad", asegura Marín. "La mayoría de la población de hecho de Melilla -la ciudad tiene oficialmente 75.245 habitantes- es musulmana", asegura Benyahia. "El acuerdo alcanzado es un paso importante hacia un mayor respeto de nuestra comunidad". Hasta ahora había en Melilla nueve fiestas religiosas católicas, pero ninguna musulmana, según la diputada local Dunia Al Mansouri.
Ceuta seguirá probablemente en breve el ejemplo de Melilla.
Fuente: Extractos del artículo escrito por Ignacio Cembrero, publicado en el periódico "El País".