De este modo, se ha evitado volver a pronunciarse sobre el retorno del embajador que fue llamado a consultas a principios de noviembre, y que por tanto lleva más de un mes sin volver a España.
El motivo de la retirada de Omar Azziman de España ha sido la visita oficial de los reyes de España a las localidades de Ceuta y Melilla los pasados 5 y 6 de noviembre. Un acto que causó un profundo malestar en el rey marroquí, Mohamed VI, y las autoridades del país, que declararon ser una visita “inadmisible” por faltar a los sentimientos de “todos los marroquíes”.
No obstante, aunque Naciri evitó hacer más declaraciones sobre la vuelta del embajador marroquí a España, hizo hincapié en que “la relación entre los dos países debe volver a la normalidad en el marco del respeto recíproco”.
El pasado 15 de noviembre, el ministro afirmaba que “el retorno del embajador del Reino de Marruecos a España se efectuará según las modalidades que han precedido a la decisión en función de la renovación, que deseamos rápida, de nuestras relaciones bilaterales”, recuerda la agencia de noticias EFE.
Un deseo de que se retomen las relaciones bilaterales con la mayor normalidad posible en materia diplomática, que fue enfatizado por el monarca español en su pasado discurso navideño.
Juan Carlos I afirmó en su discurso en la Noche Buena (24 de diciembre), en la televisión española, su deseo de resaltar “los intensos vínculos que nos unen a nuestros vecinos del mediterráneo, nuestra amistad y plena cooperación con sus legítimas ambiciones de mayor desarrollo y bienestar”.
Mientras, el tiempo sigue pasando y el embajador marroquí Omar Azziman no vuelve. Habrá que esperar a 2008 para que la normalidad diplomática vuelva a establecerse entre ambos países, cuando las autoridades marroquíes consideren que se ha consolidado un “marco de respeto recíproco”.
(28/12/07)