Esta semana ha sido la ocasión para que el barril de petróleo alcanzara nuevas plusmarcas en las bolsas mundiales, sobrepasando los 130 dólares el barril. Un negocio para los países productores pero una maldición para los importadores. Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos están al tanto, y por ello han decidido subvencionar a Marruecos.
Como es conocido Marruecos importa la casi totalidad de sus necesidades en hidrocarburos. Este fondo es el primero de este tipo Marruecos, y se le asigna como objetivo la atenuación del impacto de la factura energética sobre la economía del país, según indica el Ministerio de la Economía y Finanzas marroquí.
Este último anunció su creación en un contexto bien definido, y es un fondo especialmente dedicado al aligeramiento de la factura energética de Marruecos que ronda los 2,5 mil millones de dólares anualmente, y será todavía más ascendente en 2008; ya que sólo para el primer trimestre, las importaciones de petróleo alcanzaron más de mil millones de dólares (un aumento del 68 % en relación con el mismo período del año pasado).
Esta medida se interpone después de la decisión anunciada el viernes, por los Emiratos Árabes Unidos de conceder a Marruecos un don de trescientos millones de dólares para hacer frente al aumento de los gastos petroleros. Esta subvención se añade a una ayuda similar de 500 millones de dólares anunciada el último 6 de mayo, y proporcionada por Arabia Saudita.
Las autoridades marroquíes habían decidido no repercutir la fogarada de los productos petroleros sobre los consumidores renunciando a principios de indización. La caja pública de compensación, ya en déficit, de los carburantes y de ciertos productos de primera necesidad debería ingresar, al ritmo actual, cerca de 37 mil millones de dirhams en 2008, de la que estarían la mitad destinada exclusivamente a los productos petroleros.
ABE
(29/05/08)