Se trata de una de las principales conclusiones de los informes publicados este jueves por la Comisión Europea sobre la evolución de los planes de acción dentro de la Política Europea de Vecindad (PEV) con doce países vecinos de la Unión Europea, entre los que se encuentra Marruecos. Estos planes son programas "diferenciados y hechos a medida" en función de las capacidades de cada uno de los socios.
"Fomentar la estabilidad común y la prosperidad en las fronteras con la Unión Europea va en nuestro interés. Llegar a nuestros vecinos y apoyar su transformación es invertir en nuestra propia seguridad", resumió la comisaria en la presentación de los informes.
Tareas pendientes: reforma urgente de la Justicia marroquí y avanzar en el acuerdo de readmisión de emigrantes
El informe sectorial sobre Marruecos cataloga al país como un socio "activo y constructivo" con progresos en un gran número de ámbitos del plan de acción, pero admite que esperaba esfuerzos "más ambiciosos" en la promoción de la democracia y los Derechos Humanos, sobre todo en materias como la "libertad de prensa, la libertad de asamblea y en el modo en que se deben llevar a cabo las elecciones".
Ferrero-Waldner considera que el acuerdo de readmisión de emigrantes llegados a Europa de forma irregular desde Marruecos sigue siendo un punto pendiente, ya que su negociación “no ha progresado como se esperaba”; sobre todo porque Marruecos pone trabas a la hora de aceptar en su territorio a los subsaharianos de vuelta de Europa. Y es que, el ministro de Asuntos Exteriores marroquí, Taieb Fassi Fihri, ya manifestó a finales del año pasado que Marruecos no iba a convertirse en el “gendarme de Europa”, aunque hubiese alcanzado el Estatuto Avanzado con la UE.
No obstante, aunque la comisaria europea lamentó que el dossier del acuerdo de readmisión de emigrantes siga "pendiente" y que "todavía no se haya llegado a buen puerto", expresó el compromiso por llegar a un resultado "satisfactorio para las dos partes".
Por otro lado, el texto publicado en Bruselas señala que la reforma de la justicia en Marruecos es un “desafío esencial y urgente” para un acercamiento a la Unión Europea. Se destacan las “disfunciones del sistema judicial” en Marruecos, que “ponen en peligro las reformas emprendidas a nivel legislativo”.
Junto a los puntos por reformar o mejorar, la comisaria también ha señalado los "avances concretos" experimentados en Marruecos, como la lucha contra la corrupción y el crimen organizado, el nuevo código electoral que favorece el fomento de la igualdad de sexos con un refuerzo de la participación de las mujeres, así como un progreso en el diálogo político, la cooperación con organismos internacionales, las fronteras o la educación, entre otras acciones. Además, Europa se percata de que la pobreza en Marruecos está “en ligero retroceso” y la economía se consolida a pesar de la crisis económica mundial.
Además, Benita Ferrero Waldner explicó que el Estatus Avanzado para las relaciones de la UE con Marruecos responde a los avances conseguidos y al "proceso de modernización y de transición democrático emprendido con valentía desde hace años". Y aclaró que dicho estatus "no supone que (el plan de acción para este país) haya desaparecido".
2008: La crisis y los conflictos han “reducido el impulso” de las reformas
En general, Benita Ferrero-Waldner, reiteró su confianza en el valor de la política de vecindad para la seguridad de la Unión Europea pero admitió que el 2008 ha sido un año en el que los efectos de la crisis y de violentos conflictos han "reducido el impulso" de las reformas –sobre todo en Derechos Humanos y democracia– para las que trabajan los Veintisiete Estados Miembros de la UE con países cercanos como los del Magreb, del este de Europa y Oriente Próximo.
El informe sobre la Política Europea de Vecindad (PEV) aplicada entre la UE con Armenia, Azerbaiyán, Egipto, Georgia, Israel, Jordania, Líbano, Marruecos, Moldavia, Territorios Palestinos, Túnez y Ucrania indica que 2008 ha sido un año "difícil" para este proyecto debido no sólo al impacto de la crisis económica y financiera internacional, sino también a las crisis políticas vividas en estas regiones.
Por ejemplo, la comisaria citó casos que podrían “afectar a largo plazo” la PEV, como la actual crisis en Armenia, la falta de unidad de los líderes políticos en Ucrania, la crisis del gas, la guerra en Georgia, el bloqueo político en Líbano o el conflicto en Oriente Próximo.
No obstante, uno de los puntos positivos realizados por la Política Europea de Vecindad en 2008 y que ha permitido “importantes avances”, es el impulso dado a Unión por el Mediterráneo (UpM) en el pasado mes de julio, según destaca este informe de la Comisión Europea.
PTZ
(27/04/09)