(27/01/2011).- Los poderes públicos en Marruecos continúan asegurando que se comprometen a luchar contra la corrupción, pero los planes de acción que adoptan "no anuncian cambios notables en la política", según la ONG.
El Índice de Percepción de Corrupción da a Marruecos una nota de 3,4 sobre 10, lo que coloca al reino alauí en una situación de corrupción endémica. Marruecos se encuentra según esta clasificación justo por debajo de Túnez (con una nota de un 4,2) y por encima de Egipto (3,1) o Argelia (2,9). Además, según el Barómetro Mundial de 2009, el 90% los encuestados consideró que el pago de sobornos a las autoridades marroquíes constituía un problema serio o muy serio.
Según el mismo barómetro, seis de cada diez marroquíes encuestados piensan que las acciones del Gobierno en materia anticorrupción son ineficaces.