El precio de los carburantes ha sido una batalla constante en los últimos meses de los pescadores marroquíes, desembocando esta vez en una huelga de más de dos semanas. A partir de hoy los pescadores retomarán su actividad, aunque depende de las condiciones del temporal y del cierre de las conversaciones de este colectivo con el Ministerio de Energía, Minas, Agua y Medio Ambiente.
Uno de los puntos negociados ha sido la promesa de las autoridades de poner en marcha un plan de acción antes de que empiece el mes de marzo, para poder así disminuir el impacto negativo del aumento del precio del carburante sobre el sector pesquero. Entre estas medidas, se contempla un programa de modernización de la flota pesquera, así como la aceptación de las sociedades de distribución de reducir la diferencia de precio entre la pesca costera y de altura.
Según informa el periódico "Le Matin", los pescadores han ratificado también la propuesta relativa a la bajada de 300 dirhams (unos 26,6 euros) sobre el precio de venta de la tonelada de gasoil, la exoneración de los trámites de la TVA (equivalente al IVA), y el mantenimiento de la exención de la TVA sobre los hidrocarburos y aceites para motor.
Con esta huelga este periódico marroquí estima que debería incrementarse la producción a dos millones de toneladas (el doble que hasta el momento), así como la creación de 65.000 nuevos empleos, en un alza del valor de las exportaciones de 1.000 a 2.000 millones de dólares y en un aumento del consumo de productos del mar, de 12 a 16 kilos por habitante al año.
Unas promesas y perspectivas a tener presentes puesto que el sector pesquero representa hoy en día en Marruecos el 75 por ciento de la producción pesquera total, con 2.525 barcos y más de 400.000 personas empleadas en el sector, según datos aportados por la Federación Nacional de las Asociaciones de la Pesca Costera marroquí.
(15/02/08)