La situación geográfica de Marruecos, cerca de Europa y en medio de un importante mercado internacional de energía, dotado de interconexiones con España y Argelia, está bien posicionado y en condiciones en convertirse en una verdadera plataforma en el sector energético en la cuenca mediterránea. De hecho, según se recoge de una nota de prensa de la Oficina Nacional de Electricidad, el enlace eléctrico submarino entre España y Marruecos, inaugurado en 1997, podría convertirse en el primer tramo de una amplia red de "Autopistas Energéticas" por debajo del Mediterráneo, por el cual Europa importaría del sur del Mediterráneo electricidad proveniente de fuentes renovables, a través de una interconexión entre Tarifa, en España, y Fardiwa, en Marruecos.
Una nueva interconexión que se suma la segunda interconexión eléctrica entre Marruecos y España, de una longitud de 30 km, operativa desde junio de 2006 con una potencia de hasta 700 megavatios, y por encima de todo, la primera que se remonta a 1997. Una interconexión que consta de tres cables submarinos, iniciada a bulto por la compañía española Red Eléctrica Española, en siglas REE, y la Oficina Nacional de Electricidad, ONE, en noviembre de 2006. Una interconexión submarina que conecta la central de Melúsa, Marruecos, y la central del Puerto de la Cruz en España. Un proyecto de un presupuesto de 115 millones de euros, financiado a partes iguales por REE y ONE, incluidos los importes del estudio del fondo marino, el estudio del impacto ambiental, la extensión de los terminales y el suministro e instalación de tres cables energéticos y dos cables de telecomunicaciones.
Según la agencia de noticias francesa, hay otros "proyectos de interconexión desde hace tiempo", indicó el presidente de Transgreen, un consorcio de unas 20 entidades cuyo objetivo es estudiar la posibilidad de crear otras interconexiones submarinas en el Mediterráneo, André Merlín. El aludido subraya también "Sin embargo, dada la elevada inversión necesaria, ha resultado difícil concretarlos" hasta ahora, agregó. Y subraya la agencia: "Las cosas pueden llegar a cambiar, porque los países del Sur tienen la posibilidad de generar energía renovable y exportarla", añadió el presidente de Transgreen, integrado entre otros por la compañía de electricidad francesa EDF, Alstom, Siemens y Abengoa.
Una interconexión en el marco del proyecto REMO
La interconexión entre Marruecos y España se inscribe en el marco del proyecto REMO, concebido como una prioridad para la Unión Europea en el Mediterráneo. Una cooperación justificada, ya que en Marruecos, el consumo de energía eléctrica crece cada vez más, sobre todo cuando se trata de un país cuyas necesidades de energía se incrementan, eso es, un país en que las ventas emergenticas ascendieron a 17.630 GW en 2005, con un incremento del 8,2% con respecto a 2000. Un incremento explicado por la ONE por el aumento de las ventas a clientes de baja tensión, y de las que el 48% va a los distribuidores, el 23,5% a los industriales y el 6,3% a los sectores agrícolas, en el momento en que el resto es para otros consumidores de variada índole.
De hecho, conforme a la agencia francesa de noticias, la idea de realizar otras interconexiones eléctricas de este tipo podría concretarse con más facilidad en el marco del Plan Solar Mediterráneo (PSM), el cual prevé desarrollar la producción de electricidad renovable, en particular solar, para alcanzar los 20 GV y exportar la cuarta parte de dicha producción a Europa, sabido que la energía renovable se genera a menor costo en el sur del Mediterráneo que en el norte. Además, comprar electricidad renovable permite a las compañías europeas acercarse a sus objetivos de crecimiento en la materia y así limitar la venta de energía que es una de las causas del efecto invernadero.
Con la finalización de la nueva interconexión eléctrica, Marruecos y España, son más cerca, visto que este proyecto procura crear una infraestructura básica necesaria para la implementación de un mercado eléctrico regional, que contribuya a una mayor fiabilidad y seguridad, encima, cuando se trata de una asociación Norte-Sur, que hace que España siempre haya aportado un soporte incondicional para la implementación y financiación de proyectos de energía en Marruecos, mediante empresas españolas que contribuyen en obras importantes en Marruecos, especialmente en las interconexiones de electricidad y gas, hidroeléctricas para parques eólicos, electrificación descentralizada de los sistemas solares, o programas de apoyo a la extensión de las energías renovables.
Según los pronósticos, las autoridades energéticas en Marruecos auguran un consumo de 16 millones de TEP en 2010, mientras que la energía eléctrica neta, que era de 19.500 GW en 2005, está llamada a experimentar un aumento de alrededor del 40% para alcanzar en 27.000 GW el año corriente. En el mismo sentido, la tasa de electrificación rural que era sólo el 14% en 1990, ha podido superara el 81% y el acceso a la electricidad se extendió desde finales de 2007. Y desde luego esta interconexión permitirá la electrificación de aproximadamente 1.9 millones de hogares, o sea, lo que representa un total de 12 millones de personas, con un presupuesto de 20 millones de dírhams.
Un proyecto Euro-Magrebí
Marruecos, de acuerdo con la agencia francesa, importó 18% de su electricidad en 2009 por razones económicas, ya que el kilovatio por hora es más barato en España. No obstante, la energía renovable tal vez permita a Marruecos pese a todo convertirse en exportador a través del actual "Cable Submarino". Además marcar que, en 2020 tal vez se haya construido una interconexión submarina entre Túnez e Italia, y, posteriormente, se baraja la posibilidad de hacer otra entre Argelia y España o la isla italiana de Cerdeña, entre otros proyectos. Sin embargo, dadas las distancias, habría que enviar corriente continua en lugar de corriente alterna, como ocurre entre Marruecos y España, lo cual conllevaría pérdidas considerables, puntualizó Merlín.
Esta interconexión, que todavía está en sus comienzos, es parte del Plan Solar Mediterráneo (PSM). Este plan incluye la construcción en 2020, al sur y al este de la cuenca, capacidades de producción de electricidad renovable, sobre todo la solar, de 20 GW, cuya cuarta parte se exportaría a Europa, habida cuenta de que Europa necesita la energía renovable. Parte de esta energía verde puede provenir de la parte sur del Mediterráneo. Marruecos, que en 2009 aprobó su plan solar, se inscribe como socio para desarrollar esta red, comenzando con el desarrollo de la relación existente con España. Encima, hoy en día, la electricidad fluye en gran medida de norte a sur, por lo cual Marruecos, tiene previsto convertirse en un exportador a medio plazo a través de esta conexión de una capacidad de 1,4 GW en espera de conseguir 2,1 GW en un futuro próximo.