(03/10/11).- En el marco de la modernización de país, la luz verde de puesta en marcha de las obras de dotarse de un tren de alta velocidad se ha dado ya, para que se convierta ese sueño en realidad perceptible, y por tanto, imponerse en el continente africano como el primer país que dispone de la nueva generación de ferrocarriles, siendo un medio de transporte tanto económico como ecológico que pueda acompañar los cambios sin precedentes que está percatando el país en servicios básicos, la logística, las obras de envergadura que crecen como hondos acá y allá.
Se trata de un tren de alta velocidad, que tendrá a mano un país en África, cuyo presupuesto rondaría aproximadamente unos 1.800 millones de euros, el equivalente estimativo de unos 20.000 millones de dirhams. De acuerdo con el ministro marroquí de Hacienda, Karim Ghellab, este tren incluye una nueva línea que une Tánger con Kenitra de una superficie de unos 200 kilómetros concebida para una velocidad máxima de 350 km por hora, mientras que la línea tradicional actual que conecta Kenitra con Casablanca será fortalecida aún más de modo que el tren comunique las estaciones principales de Rabat y Casablanca.
El orgullo de Marruecos está sufragado por actores públicos y privados. Para la tesorería de Marruecos, el tren le costará unos 500 millones, inyectados por el Gobierno y el Fondo Hassan II para el desarrollo económico y social, Francia invertirá a altura de 920 millones de euros, el Fondo saudí para el desarrollo unos 144 millones de euros), el Fondo Kuwaití para el desarrollo económico árabe 100 millones de euros, el Fondo emirato para el desarrollo 70 millones de euros, y por último, el Fondo árabe para el desarrollo económico y social que participara con 66 millones de euros.
El titulado ha destacado también que ese tren que conectara Tánger con Casablanca, dos ciudades claves del país, es la primera etapa del esquema directivo de las líneas de alta velocidad establecido en 2006 y que prevé la construcción de 1.500 kilómetros de nuevas líneas que comprenden el eje "Atlántico" Marrakech-Agadir y el eje "Oriental" Fez-Oujda. El nuevo tren, previsto para diciembre de 2015, permitirá el ahorro tiempo del recorrido Tánger-Casablanca en 2:10 en lugar de 4:45) y aumentar el número de pasajeros anuales hasta siete millones, en lugar de los dos millones actuales.
Ahmed Bensalh