(20/04/12).- "A partir del próximo mayo ya no se difundirán en la televisión anuncios publicitarios relacionados con los juegos de azar porque violan el artículo 32 de la Constitución marroquí, que debe velar por la cohesión familiar y social", anunció el ministro de la Comunicación, Mustafa El Khalfi.
El Khalfi también desea reducir drásticamente las horas de programación en ese idioma. 2M, la cadena más francófona, emitirá la mitad del tiempo en árabe, un 30% en amazig (bereber) y solo un 20% en francés y español.
La iniciativa más controvertida de El Khalfi ha sido la supresión de la publicidad televisiva de loterías y apuestas hípicas a las que juegan tres millones de marroquíes. En 2011 reportaron al Estado 583 millones de euros.
El nuevo pliego de condiciones del segundo canal público de televisión 2M, recién aprobado por la Alta Autoridad de la Comunicación Audiovisual, obliga al segundo canal a advertir del momento de las cinco llamadas diarias a la oración, emitir la oración del viernes y difundir un programa mensual de contenido religioso. De este modo, 2M, que pasaba por ser el canal más abierto y progresista, se suma a la primera cadena pública marroquí, que ya integraba todos estos espacios religiosos.
Diversos medios de comunicación marroquíes han criticado la decisión.
El ataque más revelador partió del diario Le Matin, considerado cómo el órgano oficioso del palacio real. Tras rechazar la medida se pregunta preocupado si “mañana no se formularán otras prescripciones morales, alimentarias y de vestimenta”.
Para el semanario independiente francófono Telquel El Khalfi "acaba de lanzar una pequeña bomba de alcance ideológico y político que no engaña a nadie (…) decir no a El Khalfi significa decir sí al haram, y a eso ni siquiera la monarquía se atreverá", manifesta.
Por su parte, el diario "Al Ahdath al Maghrebiya" considera que "cuando un partido de referente religioso insiste en difundir el discurso religioso por los medios de comunicación, se empeña entonces (…) en difundir su propio discurso".