La Oficina de Naciones Unidas contra la droga y el crimen (ONUDC) en su último informe de 2006 informa que el cultivo de cannabis y la producción de hachis en este país han disminuido durante el año 2005 en un 40% y 61% respectivamente.
Esta disminución se atribuye a las condiciones climáticas desfavorables y a los esfuerzos de las autoridades marroquíes por erradicar este cultivo, a través de actuaciones directas, sensibilización de la población y actividades alternativas.
Según este informe, el cultivo en 2005 se situó en 72.500 ha, cuando en 2004 había alcanzado las 120.500 ha, y la producción de resina de cannabis se situó en 1.070 t, cuando en 2004 había llegado a 2.760 t.
En 2005, la provincia de Chefchaouen fue la primera productora con el 56% y 40.529 ha, seguida de Taounate, 17% con 12.362 ha, Alhucemas, 16% y 11.671 ha y Tetuán 11% con 7.916 ha. El cultivo en la región de Larache ha sido totalmente erradicado.
La ONUDC recoge también los precios de venta de cannabis a los agricultores, habiendo subido un 100% de 2004 al 2005, pasando de 2,5 €/kg a 5€/kg y la resina de cannabis ha pasado de 140 €/kg a 400 €/kg. El número de hogares que lo cultivan se situó en 2005 en 89.800.
(13/02/07)