La lucha contra la inmigración irregular a través de la cooperación común entre Marruecos con los países vecinos, como España, es una de las premisas del gobierno marroquí. Una cooperación basada “en el principio de solidaridad” y que “aborda también las causas económicas y sociales de este fenómeno, además de aspectos legislativos, institucionales y de seguridad”, destacó Aghmani.
Como resultado, la inmigración ilegal procedente desde Marruecos a España ha descendido un 16,72 por ciento en los diez primeros meses de 2007, en comparación con el mismo periodo en 2006.
Esta bajada neta se debe a la estrategia nacional de lucha contra la inmigración ilegal, según postula el informe presentado por el gobierno marroquí en la reunión que culminó el pasado 20 de noviembre sobre los países del Mediterráneo, que se celebró en Albufeira (Portugal).
Según Yamal Aghmani, en el marco de la estrategia sobre inmigración, “Marruecos repatrió 8.383 inmigrantes irregulares a sus países de origen entre 2004 y 2007”; y advirtió que la emigración irregular constituye una “verdadera amenaza” para la comunidad internacional”.
Por ello, el ministro marroquí de Empleo y Formación profesional abogó delante de los países reunidos en la Euromed, por crear redes comunes dedicadas a favorecer la inmigración legal.
El informe de Rabat subrayó también la contribución de Marruecos en consensuar un “concepto global de lucha contra la inmigración ilegal”, por la celebración durante julio de 2006 de una Conferencia euro-africana sobre la migración y el desarrollo, que permitió la adopción de medidas destinadas a hacer frente a los problemas de la inmigración ilegal.
(26/11/07)