Siguiendo el criterio de nacionalidades, los marroquíes alcanzan la cifra de 648.735 personas (más de 105.014 en un año), delante de los rumanos (603.889) y los ecuatorianos (395.808). Pero, según los analistas del Observatorio, los marroquíes son procesados por dejar la delantera a los rumanos cuyo número ha sido multiplicado por 186 por ciento, debido a las facilidades de acceso consecutivas una vez que su país forma parte de la Unión Europea.
Como rasgos generales se puede destacar que la inmigración marroquí en España está configurada en su mayoría por hombres (36 por ciento de mujeres) y de jóvenes (27,5 años de media de edad.
También, la inmigración marroquí en España tiende a echar raíces ya que cuenta con más de 152.000 niños y adolescentes de menos de 15 años de edad (cerca de 90.000 nacidos en España y los otros que han reunido a sus familiares en el marco de la reagrupación familiar).
Legalmente hablando, los marroquíes parecen, en la mayoría, al amparo de las vicisitudes de la reglamentación dado que más del 55 por ciento de ellos viven en España con una carta de residencia permanente (345.000) y más del 22 por ciento ya renovaron su primer permiso de residencia.
Geográficamente hablando, los marroquíes optan por la región de Cataluña donde el tercio eligió ahí su permanencia. Cabe destacar que de estos 211.475 marroquíes residentes en Cataluña, la mitad vive en la ciudad de Barcelona (126.895).
Andalucía acoge la segunda comunidad marroquí, con un total de 95.311 residentes; cuya primera ciudad de residencia es Almería, que alberga unos 38.000, seguida por Málaga con 21.000 residentes marroquíes.
Junto a Cataluña y Andalucía destaca la comunidad marroquí en Madrid, en donde están afincados más de 69.000 marroquíes, seguida por la región de Murcia (62.400) y Valencia (56.000).
Ahmed Bensalh Es-salhi
(18/02/08)